Capitulo 26
Rüdiger se lo quitó de encima como
si no fuera casi nada.
Una vez más me pregunté qué tal
vez esa no era su verdadera intención, y lo miré, pero parecÃa que no podÃa
importarle menos e incluso me hizo una sugerencia.
“Lady Maybaum, ¿le importarÃa
también mirar alrededor del tren? Puedo
mostrarte los alrededores".
“N-No, gracias. Estoy bien. Sinceramente, estoy un poco agotado".
Se puede argumentar cómo puedes
estar tan cansado cuando solo te levantaste temprano solo para subir al tren y
no hiciste mucho más desde entonces, pero yo estaba realmente cansado. El cansancio de ayer aún perduraba y
tuve que actuar rápido desde la mañana, por eso.
Me dejé caer en el sofá sin vida. Aterrizar sobre los cojines se sintió
como flotar sobre plumas.
Ahora que lo pienso, Rüdiger me
permitió llamarlo por su nombre de pila, pero hasta ahora, Rüdiger solo se
dirigÃa a mà como Lady Maybaum. '¿Quizás
es porque no le permità llamarme por mi nombre…?'
Mientras estábamos ocupados
comprando, no tuvimos mucho tiempo para hablar sobre cómo dirigirme
correctamente.
Es tan estricto asÃ. OÃrlo constantemente llamarme Lady
Maybaum era extraño, pero al mismo tiempo, es aún más extraño para mà dirigirme
a él solo por su nombre de pila...
Mientras lo pensaba, se lo
mencioné en silencio.
“Sir Rüdiger, por favor llámeme
por mi nombre de pila. Si solo te
llamo por tu nombre de pila, es bastante incómodo".
"¿Me estás concediendo
permiso para hacerlo?"
"No se puede llamar realmente
concesión, pero seguro, supongo".
Me encogà de hombros ligeramente.
Pero Rüdiger respondió con tanta
seriedad.
“Gracias por permitirme dirigirme
a usted por su nombre de pila, lady Judith. Parece
que nos hemos acercado, mi corazón palpita con tanta emoción".
"Mi corazón palpita con tanta
emoción", mi trasero. Es
obvio que estás mintiendo entre dientes.
Cuando solo escuché las palabras
de Rüdiger, casi sonó como si le di permiso para llamarme por mi nombre y
también podrÃa haber sido confundido con darle permiso para salir conmigo.
Si habÃa algo de emoción en su
voz, aunque fuera un poco, pensé que lo habÃa escuchado, tal vez.
¡Pero, ay, su voz monótona ni
siquiera fluctuaba un poco!
Viniendo de alguien que no sabÃa
cómo ser halagador, era divertido.
Lejos de hablar dulcemente con esa
cara frÃa suya mientras hacÃa comentarios tan conmovedores, no habÃa ningún
área en mis brazos que no estuviera libre de piel de gallina; No pude soportarlo.
La imagen de Rüdiger de la novela
original y lo que estoy experimentando ahora en persona fue tan discordante que
no pude acostumbrarme a cómo actuaba.
Desde la perspectiva de Luca, que
fue como se escribió la novela, Rüdiger era un hombre muy maduro, impasible y
reservado.
Además de eso, es un coronel, lo que evoca aún más ese estereotipo tÃpico de un
hombre en el ejército.
Desde el principio, no tuvo
necesidad de agacharse y poner la nariz mojada por nadie.
Entonces, ¿qué obtiene él al
hacerme eso?
¿Y por qué usarÃa una táctica tan
indirecta...?
Si hubiera querido algo, habrÃa
sido sencillo al afirmar eso, y se ocupó de las consecuencias en consecuencia; ese era el estilo de Rüdiger
Winterwald.
Su hermosa apariencia y la forma
en que solÃa escupir sus palabras.
En muchos sentidos, es difÃcil
creer que fuera el mismo Rüdiger de la novela original.
Pero ahora, no tenÃa suficiente
energÃa para preocuparme por sus peculiaridades.
Mientras estaba acostado en el
sofá, asentÃa sin pensar con la cabeza en respuesta a él.
La razón por la que seguÃa agotada
era que no podÃa dormir bien. ¡Porque
durante el viaje en tren a Winterwald en la novela, apareció un asesino!
Por supuesto, no fue un gran
problema, ya que el asesino fue sometido por Rüdiger, pero incluso entonces...
Solo pensar en el tiroteo hizo que
mi corazón latiera incesantemente.
Al menos cuando apareció el
asesino es más o menos durante la mitad del viaje. Si el asesino viniera al principio...
¡Ay!
Negué con la cabeza.
Las partes iniciales de El Maestro del Bosque de Invierno fluyeron
mucho más como una historia reconfortante e inspiradora.
0 Comentarios